miércoles, 21 de marzo de 2012

CAPITULO 7.



Estaba subiendo por el ascensor cuando el celular sonó (raro que tuviera señal)

Estoy a dos minutos de tu casa. Sé de un restaurante bueno. Vamos a almorzar? Obvio que yo invito. De: Gastón.

Suspira. Abre la puerta de la casa, agarra el bolso que había dejado pronto y enseguida vuelve al ascensor. Después de apretar el planta baja, tipea:

Dale, te espero en la puerta, besito. Para: Gastón.

Cuando llega a la puerta del edificio Gastón apenas estaba estacionando. La saludó contento y mientras reanudaban la marcha explicó que se había quedado mal al tener que rechazar la cena, por una reunión con amigos que había terminado mal.
Ella sonríe, él era un hombre adorable y caballero, se había quedado preocupado, y eso hablaba muy bien de él.

- Llegamos...- señaló el restó frente a donde estacionó y le devueve la sonrisa; era un lugar lindo, juvenil y fresco.
- ¡Gastón! ¿Cómo estás?- sonrió la recepcionista.
- Amanda... bien ¿vos? Ella es Lali.
- Un gusto.- se sonrieron.
- ¿Qué mesa querés, Gastoncito?- el diminutivo le daba afectuosidad.
- ¿Tenés la del fondo contra la ventana?
- Claro... decíle a Javi que te la limpie, recién la vaciaron...
- Dale...- pasaron al restorán, con unas veinte mesas y una decoración medio tecno – floral.
- ¡Gas! - un mozo la saludó.- Apareciste, loquito.
- ¿Cómo andas Mati?
- En la vuelta, como siempre. Vayan a la mesa que los atiendo al toque.- se sentaron.
- ¿Venís seguido acá?
- No... en realidad acá trabajé por primera vez, de los 15 a los 19.
- ¿Acá?
- Si. De acá pagaba las clases de canto baile, canto, guitarra y ahorraba para el auto y el apartamento.
- Se ve que se gana bien... Pero ¿Por qué te compraste un depto en Colegiales? Son los más caros...
- En realidad mi viejo conoce a un tipo que tiene una inmobiliaria en Colegiales, y logró reducir el costo. Él pagó el departamento y yo todos los meses le voy devolviendo... con el trabajo de ahora no voy a tardar en terminar de pagarle.
- Ah, mira que bien...
- Le molesta un poco que le de la plata, dice que es mi padre y todo eso... Pero no voy a sentir que es MI departamento hasta haber pagado el último peso.
- Claro.... Está bueno eso ¿No? No depender de nadie...
- A veces extraño un poco la comida de mi vieja y el ruido constante en mi casa, tengo cuatro hermanos. Pero... si, está bueno, yo que sé.
- ¿4 hermanos?
- Tres varones y una mujer. Yo soy el segundo más chico. Un caos, pero divertido.
- Si... a mí me hubiera gustado tener un hermano, las cosas se hacen más fáciles ¿No? Tenés a quien recurrir en los problemas y todo eso...
- Tiene sus pro y sus contras, como todo. Siendo tantos se generan muchas discusiones y los padres son siempre los que actúan de mediadores.. Pero si, está bueno poder contar con él otro cuando necesitas ayuda. ¿Sos hija única?
- Hija única. Para colmo, mi mamá es hija única y mi papá tiene una hermana, que es con quien vivo, que no tiene hijos. O sea que no tengo primos, nada, soy la más jóven de mi familia.
- Eso a veces está bueno, eh... Todos los regalos los ligas vos.
- Si, pero puede ser muy aburrido. En las fiestas de fin de año siempre me aburro mucho... con la que más me divierto es con mi tía Emilia y nos llevamos 9 años, así que imagínate.
- ¿Y por qué no vivís con tus viejos?
- Están en Inglaterra.
- ¿Por qué volviste?
- Primero por el trabajo, segundo porque extrañaba estar acá, y tercero porque mis padres estaban un poco paranoicos con esa especie de guerra civil en Londres, y decidimos que acá iba a estar más segura, y más tranquila. Se desencadenó todo porque mataron a un chico que iba a mi colegio, se pusieron cada vez más nerviosos y cuando llegaba un poquito más tarde sin avisar se volvían locos.
- Me imagino que debe de ser difícil vivir entre tanta violencia ¿No?
- Asusta un poco... por suerte no lo viví tan de cerca más allá del chico de mi colegio, porque todo pasaba en barrios muy lejos del mío.
- No entiendo a la gente violenta, la verdad. Es una mentalidad muy cuadrada, creer que vas a lograr cosas imponiendo fuerza.
- La verdad que si... pero bueno, andá a decirle eso a una masa enardecida de personas.
- Sos muy inteligente.- apoyó la cabeza en uno de sus brazos y sonrió.
- ¿Esa es la primera conclusión que sacás de mí?- ella también sonríe.
- No. Saqué unas cuantas antes.
- ¿Ah, si? ¿Cómo cuál?
- La primera conclusión fue “Es muy linda” aunque no lo pensé tan delicadamente... - se rió.
- ¿Y cómo lo pensaste?
- ¿Enserio querés que te diga?
- Si, dale. Los ingleses son bastante zarpaditos, eh, así que no creo que me digas nada que no haya escuchado antes.
- Pensé “Ésta petisa es un camión con acoplado” - se sonroja y él ríe.
- ¿Disculpáme? ¿Petisa? Lo bueno viene en frasco chico, querido.
- El veneno también.- levanta las cejas.- ¿Por qué no nos quedamos con la parte de camión con acoplado?
- Si, mejor. Y vos no te quejes, no todos tuvimos el don de nacer rubios, altos, y de ojos verdes, viste...
- Yo creo que la belleza es una cuestión de actitud... Si uno se cree lindo, es lindo.
- ¿Ah, o sea que vos te crees lindo?
- ¿Qué les sirvo, chicos?- apareció el tal Matías.
- ¿Qué querés, Lali?
- Eh... ¿Cuál es el menú del día?
- Merluza gratinada.
- Bueno, yo quiero Merluza gratinada, entonces.- sonreíste.
- ¿Gas?
- Odio el pescado.- hizo cara de asco.- Ah mi traéme un revuelto de champiñones y gambas.- sonrió. - Para tomar una cerveza, y de postre helado. ¿Vos qué querés para tomar y de postre, Lali?- sonrió.
- De tomar, agua sin gas, y de postre... ¿Ensalada de frutas, puede ser?
- Perfecto.
- ¿Pescado, enserio Lali? Qué decepción.- ella ríe.
- Hay muchas comidas que no me gustan, y las como igual. Hay que aprender a balancear la comida. ¿Cerveza y helado? Malísimo.
- En fin... ¿En qué estábamos?
- En si te creías lindo...
- Ah, tenés buena memoria.
- Y vos estás esquivando mi respuesta.
- No sé si de cara soy lindo, no me miro tanto... pero trabajo para tener músculos y estar en el mejor estado posible.
- Si cambiaras el alcohol a lo mejor podrías estar bastante en mejor estado.
- ¿Me podés explicar de donde saliste?
- ¿Por?
- Una adolescente que estudia y tiene ambiciones de hacer una carrera cuando tiene una justificación perfecta para no hacerlo, que evita el alcohol, que come cosas que no le gustan para tener una dieta balanceada... Sos el estereotipo perfecto, pero totalmente anormal de un adolescente.
- Epa, ojo con los adolescentes. Hay mucho prejuicio en torno a eso y nos meten en la misma bolsa, todavía quedan muchísimos adolescentes sanos. Y no digo que evito el alcohol, solo trato de tomarlo en medida y cuando corresponde.
- ¿Nunca te emborrachaste?
- Dos veces, pero en una me venía a buscar mi tía en auto, y la otra estaba segura de que no me iba a pasar nada porque fue en una fiesta en la casa de mi amiga y me iba a quedar a dormir ahí. Debes en cuando perder el control está bueno, para desestresarse, pero siempre y cuando uno esté seguro de que no va a tener ningún tipo de accidente.
- Sos muy centrada, me gusta eso.- sonrió, primero a ella, y luego al mozo que dejó los platos y vasos frente a ellos
- Digamos que conocí sociedades muy diferentes y traté de rescatar lo mejor de cada una.
- ¿En qué lugares estuviste?
- Estados Unidos, Inglaterra, Italia y España. New York, Londres, Milán y Barcelona.
- ¿Italia? Mis padres son italianos ¿Sabías?
- No, no sabía. Tenés pinta de europeo vos ¿Eh?
- ¿Si?
- Si. No sé si de un italiano... pero si.

5 comentarios:

  1. buenisimaaa nove
    pero
    pffff
    q se vaya cagar gaston..jum

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  2. Ai amei pero quiero laliter besos. Cami no tienes las otras noves del fotolog gostaria de descargarlas pra ler besos...

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  3. Me gusta esta relación de amigo! Más nove!

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  4. Grandes amigos ya,y acaban d conocrse.

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  5. q lindos los 2 y coincido con gas, no me gusta el pescado ja
    beso

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